Hola, Emilio. Sondear el aura puede servir para identificar bloqueos energéticos, efectivamente. También sirve para realizar una primera toma de contacto, sutil y delicada, con la persona que atendemos.

Cuando le doy Reiki a alguien, sobre todo si es la primera vez, me gusta acercarme de forma muy suave a esa persona. Procuro no tocar su cuerpo demasiado rápido. Dejo que mis manos perciban el aura de esa persona mientras percibo la energía que emana de su cuerpo. Esto, creo yo, también sirve para que el paciente comprenda desde el primer momento que mi forma de trabajar va a ser respetuosa y adaptada al ritmo que ella pueda necesitar, sea cual sea; que no voy a forzar nada durante la sesión. Sondear el aura también es útil para transmitir esa sensación.

Sondear el aura, ¿cómo se hace?

Cuando quiero identificar bloqueos durante la sesión de Reiki utilizo las manos como si fueran un escáner. Es una forma de detectar las necesidades energéticas.

Arrastro mis manos sobre el aura del paciente, a unos dos o tres centímetros de su cuerpo y me dejo llevar por la intuición. Allí donde presiento que mis manos hacen falta, las dejo reposar y dejo que la energía Reiki haga su trabajo. Es importante actuar de forma instantánea: en cuanto siento la llamada, poso las manos en ese áea. No me espero a pensar si estoy acertando o no. Simplemente me dejo llevar por el presentimiento y actúo de forma inmediata, sin dudarlo ni un segundo. Sólo fluyo. No permito que la mente pueda intervenir en ningún sentido.

Te recomiendo que lo pruebes la próxima vez que hagas Reiki. Es una técnica muy interesante que nos ayuda a potenciar nuestra intuición y a darnos cuenta de que la conexión que mantenemos con los demás va más allá de lo que podemos ver con los ojos.

Se puede empezar a practicar desde el primer nivel de Reiki, no hay por qué esperar.